Yo era normal.
Pum-pum... Segundos.
Pum-pum... Segundos.
Pum-pum... Minutos.
Pum-pum... Minutos.
Pum-pum,
pum-pum... Tiempo.
Aunque, a veces,
pum-pum...
me paraba a pensar...
Pum-pum...
Pum-pum...
Pum-pum... quién era yo.
Pum-pum, pum-pum...
Pum-pum, pum-pum... Pum.
Éste era el último, pensé.
Nada. Nada. Nada. Nada.
Todo había acabado.
Pum-pum... Segundos.
Pum-pum... Minutos.
Pum-pum, pum-pum... Tiempo.
Renacer en un verso.
Héctor Martínez
0 comentarios:
Publicar un comentario